NOSOTROS

Nuestra historia inicia en el año 2006, cuando en la ciudad de Puyo era muy común encontrar en la mayoría de hogares animales silvestres amarrados o encadenados en los patios de las casas o encerrados en jaulas pequeñas, de igual manera sin ningún control se comercializaba en los mercados monos, loros, tortugas, serpientes, etc.

Realmente el problema provenía del interior de la provincia, ya que a diario se sacaba para el comercio animales silvestres, carne de monte y muchos artículos confeccionados a manera de artesanías o vestimenta con pieles, huesos, plumas teniendo como mercado en las grandes ciudades del país.

Sin duda alguna, estas actividades eran normales dentro de las costumbres de la población de Puyo, porque no existía   el control de las autoridades, el comercio ilegal seguía creciendo y sumando la migración de la población indígena hacia la ciudad la demanda era aún mayor.

El desconocimiento de la población hacia temas ambientales y de conservación era nulo, muy pocas personas se preocupaban de la gran problemática que se estaba generando en las poblaciones silvestres y el ecosistema en las que habitan.

Desde niño tuve una pasión muy grande por la naturaleza y todos los animales que en ella habitan, con la ayuda de mis padres y su aporte económico decidimos empezar a crear un lugar donde se pueda albergar estos animales.

Contábamos con una propiedad que fue adquirida en el año 1997, la misma que estaba destinada a ser una granja integral auto sostenible, pero las condiciones del suelo, el clima y la falta de conocimiento en aquel entonces, hizo que muchos de los proyectos no den resultados.

Con el apoyo de mis padres iniciamos esta maravillosa aventura, realizamos los trámites en el Ministerio de Ambiente para obtener los permisos de funcionamiento. Una vez que obtuvimos la patente los animales empezaron a llegar y YanaCocha dejo de ser un sueño y se convirtió en una realidad.

Al principio fue muy duro, no contábamos con el conocimiento técnico, ni con los recursos para mantener a los especímenes albergados, pero la vida está hecha para los soñadores y las personas para alcanzar el éxito buscan de cualquier forma cumplir sus sueños.

En el año 2007, los animales albergados sumaban más de 100, para su alimentación y el mantenimiento del Centro era muy difícil. La falta de apoyo por parte del Estado conllevo a que YanaCocha abra las puertas al público, para que los visitantes puedan conocer la problemática que se estaba causando al sacar animales silvestres de su hábitat y se utilizó al Centro como una herramienta para la educación ambiental y   obtener recursos que permitan continuar con nuestro trabajo.

En un inicio las instalaciones en las que albergábamos a los animales eran muy pequeñas, de igual manera las dietas que proporcionábamos no eran las más adecuadas, por lo que fuimos acreedores a muchas críticas.

Pero, a medida que el tiempo transcurría, todo iba mejorando y cambiando, tuvimos el apoyo de diferentes centros de rescate, zoológicos, técnicos y especialistas que se seguían sumando a nuestro proyecto.

A partir del año 2009  YanaCocha ha venido teniendo un crecimiento muy significativo en el plano ambiental, educacional, investigativo y turístico, en la actualidad contamos con más de 200 animales albergados, disponemos de un   Departamento de veterinaria, instalaciones naturalizadas acorde a cada una de las especies albergadas, programas de voluntariado, pasantías, becarios, proyectos de investigación, rehabilitación, la reserva Ecológica Tamandúa. Hemos firmado convenios con más de 30 instituciones públicas y privadas, con universidades y colegios a nivel nacional, colaboran con nosotros los mejores investigadores y catedráticos del país. Hoy YanaCocha, es un referente a nivel provincial y regional.

Lo más importante, hemos logrado concientizar a la población sobre la protección y respeto hacia la vida silvestre, como también, hemos   cambiado la vida de cientos de animales silvestres liberándoles en la reserva Tamandúa, ellos ahora se encuentran en su hogar. La Selva Amazónica Ecuatoriana.